El Gran Premio de Brasil en el circuito de Interlagos llegó con todos los ingredientes para una carrera épica. En la batalla por el título de pilotos, McLaren consiguió el 1-2 en la carrera Sprint. Fue Oscar Piastri quien se adelantó, habiendo clasificado delante de su compañero Lando Norris. Era evidente que las reglas “papaya” se iban a dar y el resultado dio como vencedor a Lando Norris. Max Verstappen pudo limitar el daño con el tercer lugar. La clasificación para la carrera principal tuvo que moverse al domingo a las 7:30am, hora local, debido al mal estado del tiempo del sábado. Verstappen no pudo pasar de la Q2 al encontrarse con una bandera roja en las postrimerías de la segunda tanda mientras que Norris se adjudicó la pole. El holandés tenia una penalidad adicional de cinco puestos al añadir un motor nuevo y con ello partiría en decimoséptimo lugar. La mesa parecía estar servida para Norris y McLaren quienes contaban con una tremenda ventaja. Lando estaba escoltado por George Russell en la grilla de partida quien consiguió la segunda ubicación y Yuki Tsunoda en tercer lugar, luego de una extraordinaria actuación en la mojada clasificación. Alex Albon no partiría debido al accidente que sufrió en clasificación donde los de Williams no tuvieron tiempo para reconstruir el auto.
En la vuelta de reconocimiento Lance Stroll se sale del trazado, choca su auto rompiendo la trompa y luego se atolla en la cama de leca. Los comisarios emiten un anuncio de “aborto de partida” pero en el caos creado, Lando Norris piensa que debe seguir girando como si fuera una bandera amarilla en todo el circuito. Russell, Tsunoda y Liam Lawson lo siguen. Al ver la confusión el director de la prueba envía el anuncio a los demás de dar otra vuelta de reconocimiento para luego detener la carrera. Este error le costaría 5,000 euros tanto a Norris como a Russell. En el caso de Mercedes, estos tendrían otros 5,000 euros adicionales de multa en cada auto por variar la presión de los neumáticos tras esta detención, cosa que está prohibida.
En el segundo intento de partida, Russell toma la punta y dirige la carrera cómodamente mientras que todos los de atrás hacían lo que podían con la poca visibilidad debido a la lluvia que por momentos variaba de mas a menos y de menos a mas. Verstappen fue pasando autos desde el principio logrando el decimo lugar al adelantar a Hamilton en la segunda vuelta. Max se venía con todo y para la sexta vuelta ya estaba octavo. Luego vinieron Piastri y Lawson y para la vuelta 11 ya estaba sexto. Aquí se encontró con el trencito de Tsunoda, Ocon y Leclerc. Este grupo no era fácil y se mantuvieron así por varias vueltas. La lluvia había casi parado y los intermedios empezaban a recalentarse.
Para la vuelta 25 la lluvia había regresado con un poco mas de fuerza y Ferrari es el primer equipo en llamar a uno de sus pilotos: Leclerc. No era lo que se esperaba ya que había que evaluar el desarrollo y Sainz que estaba peleando los últimos lugares podría haber sido sacrificado para proveer de mejor información a Leclerc que estaba en quinto lugar. Norris por su lado pidió entrar, pero le pidieron que no lo haga. Muchos esperaban una bandera amarilla pero las llantas ya estaban sobre el final de su vida útil. Nico Hulkemberg se sale de pista y queda mal parado. Esto crea una situación de VSC o coche de seguridad virtual. En la vuelta 28 cuando se da la indicación que el VSC esta por terminar Russell y Norris entran por caucho nuevo perdiendo sus lugares de vanguardia. Ocon lidera sobre Verstappen, ellos no han parado aún. Gasly se ubica tercero delante de Russell, Norris y Tsunoda. Luego vino el despiste de Colapinto y la bandera roja. Esto sello el desenlace ya que los tres primeros, Ocon, Verstappen y Gasly podrían cambiar neumáticos sin perder posiciones. Eventualmente, Max pudo rebasar a Esteban en pista y hacerse de la victoria, extendiendo su ventaja en el campeonato de pilotos. El 2-3 de Alpine los catapulta al sexto lugar en el campeonato de constructores, un avance que de mantenerse así les significaría unos 50 millones de euros en premio adicionales para la siguiente temporada.
McLaren tenia todas las de ganar y no pudieron concretar. Ferrari se deslució muchísimo y jamás fueron contendores. Mercedes mostro una pequeña mejora en las manos de George Russell mas no en el volante de Lewis Hamilton que se quejó muchísimo durante todo el fin de semana.
Hacemos una pequeña pausa para retomar el final de temporada con tres fines de semana seguidos. Las Vegas, Qatar y Abu Dhabi es lo que queda de este entretenido campeonato que seguiremos disfrutando… ¡desde arriba!
*Gastón Basadre. Destacado periodista especializado en deporte automotor. Ha trabajado en ESPN y otras cadenas importantes. Columnista colaborador en Perú Off Road & Racing