
El equipo Ferrari ha presentado una carta pidiendo reconsideración de la sanción a Carlos Sainz al final del Gran Premio de Melbourne. Sainz fue penalizado con 5 segundos adicionales a su tiempo de carrera al haber sido encontrado culpable por los comisarios del accidente con Fernando Alonso, quien peleaba por la tercera posición. Uno de los argumentos presentados es que el único sancionado fue el piloto de Ferrari cuando hubo dos accidentes más, Pierre Gasly y Esteban Ocon de Alpine además de Logan Sargent y Nick DeVries, pero me parece que ese argumento es casi inválido ya que todos los involucrados quedaron fuera de competencia. La cita es el martes 18 de abril a las 8am en Paris vía Zoom.
La comidilla de la semana la dio el comentario que ha ido subiendo de volumen sobre la posible salida de Adrian Newey de Red Bull. El aspirante a contratarlo sería nada menos que Mercedes Benz. Ante tanta especulación en redes y la prensa escrita, Chris Horner, jefe de escudería en Red Bull, tuvo que salir a desmentir el hecho diciendo que Newey tiene para muchos años más con los austriacos. El problema es que todo esto es simplemente una repetición de algo que ya ha sucedido. Veamos quien es Adrian Newey y su historial en el mundo automovilístico.
Adrian Newey nació en Inglaterra en 1958. Se graduó con honores en Aeronáutica y Astronáutica en la Universidad de Southampton en 1980. Inmediatamente después se unió al equipo Fittipaldi de Formula 1 bajo la tutela de Harvey Postlethwaite. En 1981 se unió al equipo March y fue el ingeniero de Johnny Cecotto en la F2 europea. Con ellos empezó a diseñar autos de carrera, siendo su primer proyecto el IMSA GTP con quien obtuviera dos campeonatos consecutivos. En el ’84 se mueve al proyecto March Indy Car trabajando como diseñador e ingeniero de Bobby Rahal en el equipo Truesports. Su March-IndyCar 85C ganó el campeonato de 1985 en las manos de Al Unser así como las 500 Millas de Indianapolis con Danny Sullivan. En el ’86 se va con el equipo Kraco como ingeniero de Michael Andretti. El March 86C de su diseño ganó el campeonato y las 500 de Indianapolis con Bobby Rahal al volante. En el ’86 se pasó al equipo Haas-Lola de F1, pero el equipo se retiró a fines de año y fue recontratado por March, esta vez para encargarse del proyecto Formula 1 como jefe de diseño.

Su primer diseño fue el March 881 que fue competitivo. En el ’90 March se convierte en Leyto House Racing y aunque tuvo buenos resultados al principio no dio la talla a la competencia y fue despedido. Curiosamente Newey ya sabía que debía de cambiar de aire y Williams lo contrató. En los ‘80’s y ‘90’s Williams era un equipo de punta junto con su director técnico Patrick Head quien no demoró ni un segundo en contratarlo. Esta dupla dominó la Formula 1 rápidamente. Construyeron un auto que iba a la par del McLaren. El esfuerzo del gran Ayrton Senna y la poca confiabilidad del motor Renault hizo que el piloto líder de Williams, Nigel Mansell, perdiera el título. En 1992 corrigieron los problemas con el motor y Mansell se corono campeón y Newey conseguía su primer título como constructor. Repitió la proeza en el ’93 con Alain Prost. En el ’94 tuvieron un año que partió mal, no pudiendo mejorar al Benetton B194 diseñado por Rory Byrne. La debacle vino en el Gran Premio de San Marino donde Ayrton Senna pasaría a la inmortalidad en el Williams diseñado por Newey. Esto le traería años en corte con acusaciones de muerte por omisión, caso que finalmente seria resuelto en el 2005 con la absolución de todas las acusaciones. Hacia el final de la temporada, la FIA sanciona a Michael Schumacher con una suspensión por dos fechas y esto le permite un tercer título consecutivo. El ’95 fue el año del Benetton y para cuando Williams ganara con Damon Hill y Jacques Villeneuve en el ’96 y ’97 ya Newey estaba en camino a McLaren. Aquí su influencia empieza con auto del ’98 donde Mika Hakkinen gana el campeonato, repitiendo en el ’99 y perdiendo 2000 por solo 19 puntos en lo que sería el inicio de la era Schumacher-Ferrari.
Newey se quedó en McLaren hasta el 2006 donde Ron Dennis salía a desmentir la salida de Newey semana por medio, pero en este negocio el mejor postor manda.
En Red Bull empezaban casi de cero y para el 2009 ya se presentaban como contendores. En el 2010 Newey se convirtió en el único constructor en ganar campeonatos con tres equipos diferentes. En el 2014 Red Bull anuncio la extensión del contrato con Adrian Newey por “varios” años cuando se especulaba sobre una oferta de 20 millones de libras esterlinas por parte del equipo Ferrari. Lo único que previno una nueva arremetida del equipo austríaco fue la poca confiabilidad de los motores Renault y Honda al principio. Ahora llevan dos títulos consecutivos y un auto que está en otra liga, pero ¿estará Newey pensando en nuevos retos? Repito, el mejor postor gana.
Nos queda todavía un fin de semana por medio antes de ver que mejoras traen a competencia cada equipo. Quedan pocos días para volver a tomar vuelo y seguir la trama…..¡desde arriba!